Una de las partidas a las que debemos dar importancia a la hora de plantear una reforma, es la electricidad. Suele ser uno de los puntos que presentan mayores deficiencias en una vivienda en mal estado, y que necesitan ser completamente renovados.
Es necesario planificar el alumbrado y la electricidad, habitación por habitación, pensando en todas nuestras necesidades, desde puntos de luz, hasta equipos multimedia, pasando por un videoportero, teléfono, tomas de TV o interruptores, entre otros.
Merecen especial atención los enchufes de electrodomésticos en la cocina; los grandes y los pequeños. Es muy importante pensar en todas las necesidades presentes y futuras de nuestra cocina, y prever su instalación eléctrica. Desde los elementos obvios, como el frigorífico, o el horno, hasta los que podamos tener o añadir, como una cafetera, un tostador, etc.
En zonas de paso, habitaciones, o zonas comunes, sería adecuado instalar conmutadores, que nos permitan encender o apagar desde diferentes sitios de la estancia, así como reguladores de intensidad lumínica, en zonas donde creamos que el graduar la luz, puede proporcionarnos cierto confort.
Estas son fotos de dos obras distintas, que realizamos en Madrid, donde se ven los nuevos puntos de luz, creados en el techo, para un salón y un baño, respectivamente.
A los puntos eléctricos que presente la casa, siempre será adecuado añadirles nuevos, e imaginar nuestras necesidades reales, para pensar en su altura, dónde situaremos las tomas, si queremos puntos de luz en techos o paredes, y la posibilidad del uso futuro de nuevos aparatos eléctricos.
En esta obra, que realizamos en una vivienda del centro de Madrid, se situaron puntos de luz en las paredes donde estaban la puerta y la ventana, creando una iluminación indirecta para el resto de la estancia. También solemos prever puntos de luz similares, justo sobre los armarios, porque nos parece una solución muy acertada, que se refleja en una mayor comodidad diaria.
